METALES
PESADOS O METALES NOCIVOS
Hace
unos meses era noticia en El País “la primera planta de Europa para reciclar
metales pesados”. Gracias a una nueva tecnología creada en Galicia, capaz de
procesar 15.000 Toneladas al año de hierro y aluminio, que antes iban al
vertedero.
Recuperar y reutilizar metales
En principio la noticia es positiva, es bueno que se recicle cualquier
residuo y en especial los metales, hierro y aluminio, que volverán a integrarse
en el ciclo industrial. Precisamente eso es respetar el ecosistema, proteger la
salud pública, y recuperar riqueza, creando trabajo y beneficio.
Pero a nivel técnico confunde las cosas pues obviamente no se puede llamar
metal pesado al aluminio, aunque sea un metal tóxico. Dado que hay gran confusión
sobre metales pesados o ligeros, presento unas notas apresuradas.
Con frecuencia se confunde metal pesado con metal tóxico o nocivo.
Aunque no hay un acuerdo de criterios, generalmente se considera “metal pesado”
a aquel elemento con densidad mayor a 4,5 g/cm3.
Metales más comunes (Peso específico g/cm3)
Magnesio
|
1,74
|
Cobre
|
8,96
|
Berilio
|
1,84
|
Polonio
|
9,3
|
Aluminio
|
2,7
|
Plata
|
10,50
|
Bario
|
3,5
|
Plomo
|
11,35
|
Titanio
|
4,54
|
Talio
|
11,85
|
Radio
|
5,5
|
Rodio
|
12,45
|
Vanadio
|
6,11
|
Mercurio
|
13,6
|
Cromo
|
7,19
|
Tantalio
|
16,65
|
Manganeso
|
7,21
|
Uranio
|
18,95
|
Estaño
|
7,26
|
Oro
|
19,32
|
Zinc
|
7,29
|
Wolframio
|
19,34
|
Hierro
|
7,86
|
Plutonio
|
19,84
|
Cadmio
|
8,65
|
Platino
|
21,45
|
Cobalto
|
8,9
|
Iridio
|
22,4
|
Niquel
|
8,91
|
Osmio
|
22,6
|
Metales ligeros
El Aluminio, como el Magnesio, el Berilio y el Bario, se consideran
metales ligeros, mientras que el Hierro ya es un metal pesado, aunque todos
ellos pueden ser tóxicos si entran en la cadena alimenticia, o por vía cutánea,
como pasa con los desodorantes a base de hidróxido de aluminio, reconocido como
causa de cáncer de mama.
Metales pesados
Cada vez más personas tienen problemas de hipersensibilidad con el
Níquel, el Cromo, o el Rodio presentes en joyería, bisutería y utensilios de
cocina, como unos cubiertos inoxidables, o con el Zinc, Cobre y Plomo muy
usados en las cañerías, y hoy
prohibidos. Hablamos demasiado de la toxicidad del Mercurio (vacunas, pescado,
amalgamas), o del Plomo (pinturas, tuberías), pero tienen conocidos efectos
nocivos el Titanio, Manganeso y Vanadio.
Por ejemplo, un metal raro como el Tantalio es ahora omnipresente en
la electrónica de los dispositivos móviles, como teléfonos, tabletas, cámaras y
ordenadores, satélites y misiles, y también se usa en implantes quirúrgicos. No
se ha establecido su toxicidad, pero su impacto socioambiental es devastador, y
es la causa de genocidio por la guerra del Coltán (Congo).
Igualmente el Titanio es un problema por su proliferación en pinturas,
en implantes y odontología. Aunque se afirma que es muy estable y poco tóxico,
el bióxido (o dióxido) de titanio tiene la habilidad de causar daño celular
sobre el ADN y puede ser carcinógeno. En 2006, la Agencia Internacional de
Investigación sobre el Cáncer (IARC), reclasifica el dióxido de titanio (TiO2)
como "posiblemente cancerígeno para los seres humanos" (Grupo 2B),
sobre la base de experimentos con animales.
Metales radiactivos
Y no olvidemos que cantidades ínfimas, microgramos, de Torio o de
Polonio muy radiactivos, son mortales en pocos días, y no olvidemos el Uranio, presente
en muchos materiales de construcción. Si pensamos que la radiactividad es un
hecho extraño es porque no usamos a diario un contador Geiger-Müller, como las
amas de casa rusas después de Chernobil.
La realidad es que hay muchos productos radiactivos dentro de casa
(metales y no metales), como el gres, el granito, e incluso el ladrillo, el
hormigón, muchas pinturas o cualquier cerámica, y la radiactividad es la
primera causa de leucemia y cáncer.
Metales cercanos
Además en Bioconstrucción se considera nociva la presencia de masas
metálicas en la casa (hierro estructural), y más aún cerca de la cama, como el
somier metálico o el colchón de muelles. En la casa los metales producen
efectos eléctricos y/o magnéticos indeseables que pueden ser nocivos. O sea que
hay que valorar el electromagnetismo, la radiactividad, y todos los efectos
(electro)químicos de los metales.
Metales nocivos
Muchos metales son esenciales para la vida y necesitamos especialmente
el hierro (anemia), cadmio, cobre, cromo y zinc en cantidades ínfimas. Sin
embargo el exceso de metales en el organismo es tóxico y acumulativo, y
requiere tratamiento para su eliminación (quelación).
La presencia de metales en el entorno cercano incrementa la
electropolución y la intoxicación por metales tóxicos, frecuentemente por el
Mercurio de las amalgamas, es una de las causas de electrosensibilidad.
La minería metálica en general tiene una ecotoxicidad alta, por su
persistencia en el medio, y en particular la metalurgia del Aluminio destaca
por su alto impacto ambiental. Resumiendo hay que tener precaución con todos los metales, aunque no sean pesados, esto
exige respetar el ecosistema y proteger la salud pública.
© Carlos Martínez Requejo. DOMOBIOTIK. Mar.12.
Muy post la verdad; diría además que el acero viene bien para el mobiliario hosteleria pues permite limpiar con facilidad las manchas y resiste de lujo las altas temperaturas e incluso ciertos golpes… todo está rigurosamente resistido por el acero inoxidable. Además, si los tratamos correctamente, pueden durar muchos años en perfectas condiciones.
ResponderEliminarPodemos aceptar el acero en hostelería, pero no recomendamos masas metálicas cerca de un puesto de trabajo, y menos cerca de la cama.
EliminarNo podemos ignorar lo sefectos geomagnéticos, electromagnéticos y ferromagnéticos de los aceros.