Tormenta solar máxima
En enero de 2013, el Observatorio de Dinámicas
Solares de la NASA alertaba de una mancha colosal que provocaría potentes
tormentas solares. A finales de enero el Sol lanzó una “eyección de masa
coronal” directamente hacia la Tierra. Esta alerta de la NASA provocó mi
intervención en La Nit dels Ignorants
2.0 de Catalunya Radio, en la madrugada del lunes 21 de enero, para
responder a estas preguntas ¿Que efectos
pueden tener estas llamaradas solares sobre la Tierra y todos nosotros? ¿Que
hay de cierto en la denominada tormenta geomagnética?
La
tormenta solar consiste en una nube ardiente de partículas y radiación enviada
al espacio, y que puede alcanzar nuestro planeta al cabo de uno o tres días. Se
producen en la corona del sol explosiones que disparan grandes cantidades de
radiaciones electromagnéticas que nos alcanzan a la velocidad de la luz, en
menos de 8 minutos, y billones de toneladas de plasma que viajan entre uno y seis
millones km/h (aprox. 300-1800 km/seg).
Una
gran llamarada solar puede alterar durante semanas nuestra vida diaria. Las
pequeñas llamaradas de clase M (intensidad media) son habituales y gracias al
escudo protector de la magnetosfera apenas nos damos cuenta, excepto si somos pilotos
de avión, o en latitudes polares (auroras boreales). Pero las más intensas de clase
X, pueden afectar a las persones sobre todo a los sujetos hipersensibles con
efectos neurológicos, el incremento de la radiación solar puede aumentar las
probabilidades de brotes psicóticos o síntomas esquizofrénicos.
APAGÓN TECNOLÓGICO
Países desarrollados como
EE.UU. o Reino Unido toman medidas para prevenir el «apagón tecnológico»,
publicando un
decálogo de protección frente a una tormenta geomagnética. Si una gran eyección solar, como la
ocurrida en 1859, se repitiera en el siglo XXI, las consecuencias podrían ser
devastadoras, según algunos expertos. Los accidentes aéreos y de tráfico se
multiplicarían por fallos en los sistemas navegación y señalización. Teóricamente
todos los sistemas electrónicos son vulnerables, afectando a teléfonos celulares, satélites de
comunicaciones, navegación, aviación, apagones radio, GPS, etc. Las redes
eléctricas sufrirían un colapso total, dejando a las ciudades, las industrias, o
los hospitales sin energía. Continentes enteros podrían quedar en la oscuridad
durante meses y una "escasez crónica de energía sería posible", según
el Consejo de Investigación Nacional USA.
¿EXCESIVA
ALERTA DE LA NASA?
La
NASA ha dado una alerta ya en 2010, anunciando el máximo solar para 2011 o 2012.
Cada 11 años entramos en un periodo de máxima actividad solar, que ahora
anuncian para hacia finales del 2013, aunque es imprevisible su potencia.
Según
la NASA una tormenta solar máxima, de categoría X, amenaza la Tierra en 2013.
Sin embargo los
expertos rusos del Centro de Pronósticos del Clima Espacial del Instituto de
Magnetismo Terrestre, Ionosfera y Propagación de Ondas de Radio (IZMIRAN), pronostican que el máximo ya ha pasado y 2013 será un año de moderada
actividad solar.
¿A que expertos escuchamos?
Estadísticamente la probabilidad de que el Sol emita un pulso electromagnético
de clase X es menor del 1%. Históricamente una tormenta solar de máxima
intensidad (X), sólo se ha producido una vez cada mil años (Evento Carrington
1859, evento Carlomagno 774).
¿Se trata de otra
campaña de miedo para vendernos refugios ABQ? Poderosas
empresas multinacionales están construyendo carísimos búnkers
subterráneos, refugios anti-catástrofe
(Atómica-Bacteriológica-Química).
La tormenta solar
del pasado jueves 11 de abril, según la NASA la mayor en lo
que va de 2013, ha sido una llamarada solar de clase M 6.5 (nivel medio),
produciendo fallos en las comunicaciones de radio y GPS. Cada vez que esto
ocurre, al menos una vez por trimestre, recibo informes de personas
hipersensibles, que se quejan de una seria agudización de sus síntomas
habituales, sin saber que hay tormenta solar.
EFECTOS
DE LA ACTIVIDAD GEOMAGNÉTICA DEL SOL
Los síntomas
son similares al Síndrome de las Microondas: Nerviosismo, ansiedad,
estrés, insomnio, mareos, vértigos, ruidos y zumbidos en los oídos, inestabilidad, temblores, irritabilidad, torpeza,
adormecimiento, agotamiento, problemas de memoria a corto plazo,
desorientación, náuseas, intranquilidad, dolores de cabeza, taquicardia o
palpitaciones del corazón.
¿Nos ocurre esto más de lo normal? El sistema
nervioso humano es una eficaz antena radioeléctrica, y las persones
electrosensibles deben tomar algunas precauciones para protegerse de las
tormentas geomagnéticas. Pero no hace falta construirse un búnker
subterráneo,
nos servirán las mismas medidas de protección que usamos frente a la
contaminación electromagnètica terrestre. Por
ejemplo, el apantallado electromagnético usado para protegernos de las
microondas de la telefonía móvil. Como referencia vivir cerca de la Torre de
Collserola, o de Torrespaña, sería como tener una tormenta solar máxima de modo
permanente.
©
Carlos Martínez Requejo. May.13.
LINK
AUDIO: Catalunya Radio. La Nit dels
Ignorants 2.0. 21/01/2013. 1 am.
No hay comentarios:
Publicar un comentario